Cuatro lágrimas de plata: Novela Romántica Lésbica (LGBT) (Rozando Labios) (Spanish Edition) by Ángela León Cervera

autor:Ángela León Cervera [Cervera, Ángela León]
La lengua: spa
Format: epub
publicado: 2020-11-25T23:00:00+00:00

1.3

¡Ximena! ¡No me lo vas a creer, Ximena! Acabo de recibir una noticia... ¿Recuerdas a tu amada ADA? Sí, sí, no me desvíes la mirada ni pongas esa cara de idiota... La recuerdas, ¿no es verdad? Por supuesto que la recuerdas... Me pregunto si luego de todo estos años has logrado olvidarla... Imagino que no, pero no me torturaré con eso justo ahora, desde que reapareció en mi vida he estado sintiendo muchas emociones y la verdad, la verdad no me hace nada bien experimentar estas cosas.

Al grano, al grano antes de que esta maldita mente mía me secuestre y me lleve a centenares de recuerdos amargos... Te decía que hoy recibí la noticia de que tu amada ADA había salido para siempre de la isla y, ¿adivina qué? No tendremos el gustazo de cruzarnos con ella nunca más... Me rio. Me rio con muchísimo placer solo de recordar cómo comenzó nuestra venganza... Sí, nuestra. Se podría decir que fue más tuya que mía, Ximena, porque si te pones a ver, tú fuiste la principal agraviada.

Nuestra jugada maestra fue la forma en la que te le apareciste ese 12 de diciembre, saludándola como siempre solías hacerlo y diciéndole que celebrabas tu cumpleaños 27... Me hubiese encantado ver su cara de imbécil ante semejante coincidencia... Recuerdo que esa frase bastó para que abriera su primer resquicio de fragilidad y nos dejara la entrada libre para obrar en sus sentimientos y en su mente como mejor nos dio la gana, ¿recuerdas? Me pareció que la muy imbécil dijo algo así como: "Hoy estaría cumpliendo 27 años una persona muy especial para mí" o cualquier otra cursilería parecida, ¿no es verdad? Y tú... No puedo parar de reír, espera, espera... ¡Tú! Tan solícita como siempre, tan tierna como siempre, procediste a ahondar en su duelo, en su nostalgia y ella te fue refiriendo las cosas de a cuenta gotas, con esa discreción que siempre la caracterizó. Sí, así es.

Sí. Ahora que me quedo en silencio por minutos y reflexiono sobre esto, reconozco que esa era una de las cosas que más me simpatizaba de esa maldita, la forma que tenía de relacionarse con todos, pero en el fondo, de no relacionarse con ninguno... Salvo contigo. Salvo contigo, Ximena, que supiste ganarte su confianza... ¡Ganarte su confianza para que esa maldita hipócrita la traicionara haciéndote todo ese daño! Abusando de tu cuerpo, colocándote en una situación tan adversa con tu familia, con tus padres y ocasionando... ¡Ocasionando ese maldito accidente que te desbarajustó la vida por entero!

¡Qué bien que nos hemos vengado! ¡Lo celebro! Lo celebro poniéndome de pie y dando palmadas como loca, aunque despierte a todos, ¡a todos! ¡Lo celebro! ¡Qué bien que siempre tuviste la palabra precisa, el recuerdo justo, la referencia exacta para envolverla de a poco, para convertirla en la protagonista de su propio laberinto de locura y para envolverla en nuestro juego perverso!

Sí.

Sí...

Maldita sea, Ximena...

Lamento, no sabes cuánto lamento, que tuviera la cordura de salirse justo a tiempo...

Lo lamento tanto, porque no sabes cómo me hubiese encantado volverla loca.

descargar

Descargo de responsabilidad:
Este sitio no almacena ningún archivo en su servidor. Solo indexamos y enlazamos.                                                  Contenido proporcionado por otros sitios. Póngase en contacto con los proveedores de contenido para eliminar el contenido de derechos de autor, si corresponde, y envíenos un correo electrónico. Inmediatamente eliminaremos los enlaces o contenidos relevantes.